El incidente ocurrió en una tienda de artículos domésticos luego de que la víctima, Heather Sprague, comenzó a grabar la acalorada discusión entre un empleado y Hunter, que exigía devolver un artículo que no tenía consigo. Hunter se percató de que Sprague la estaba filmando, se acercó a ella y le tosió en la cara.

En ese momento los diagnósticos de COVID-19 en EU no estaban ampliamente disponibles y Sprague, quien entonces estaba siendo tratada por un tumor cerebral, pasó días buscando dónde hacerse una prueba, que finalmente dio negativo. Las preocupaciones que le produjo pensar que la habían contagiado intencionalmente y que con ello su familia estaría en riesgo la llevaron a denunciar el hecho ante la Policía. Un mes después Hunter fue arrestada.

Con información de Sin Embargo.